Rotten

En mi cabeza tenía una idea obsesiva en torno a la muerte

Una idea obsesiva y prematura puesto que me acompañó desde niño

Desde la infancia más remota

Desde los comienzos de mi recuerdo y hasta

Esta idea de la muerte instalada en mí

Subido en mi aura, miro más allá del muro

Buscándome entre el gentío del no futuro

Directo croché en la jaula mental, valetudo

Cuida la cuerda o verás al deshacer el nudo

El dolor solo existe en la piel que habita

Tumbado al sol deshaciendo la estalactita

Ah, la dolce vita, ¿Cuánto da y cuánto quita?

Milana bonita, Milana bonita

El búho y su canto, universal esperanto

Levito en la paz que sucede al llanto

Más allá de donde convergen la fe y la ciencia

El continuo aprendizaje implica descreencia

Vivir es concatenar muertes

¿Cuántos yo cadáveres reposan en mí inertes?

No me reconozco en esa foto aquel invierno

Y no me reconoceré en el texto que estoy escribiendo

Cuando el espejismo es estar despiertos

Solo me debo a mis sueños insurrectos

Porque ¿Qué somos sino recuerdos y proyectos?

Entre carne podrida e insectos

Me entrego a la corriente, no nado

Mísero quien busca controlar lo que no está en su mano

Hasta que el río agonice en un mar lejano

De aguas tranquilas y coral dorado

En el dogmatismo de mi yo ateo

Hace mucho que no existes pero te veo

En el trono de cristal senta'o en mi mental templo

¿Qué es esta obsesión con el morir del tiempo?

¿Qué es esta pasión por la vida y su trama?

El sufrir del hoy es el maestro del mañana

Abrazo el dolor mientras me cercena el alma

Porque es fruto de la psique y condición humana

En la penumbra mi norte, el brillo bajo esas puertas

Tu sombra susurrándome en lenguas muertas

Si estoy conmigo no estoy solo entre flores yertas

Asumiendo verdades inciertas

Por las que vendrán, por las que se esfuman

Tocando el horizonte como Truman

De vuelta al inicio miro de tú a tú al final

Volviendo a aprender a andar sobre cristales y tumbas

Mi armada invencible, hundido, tocado

Repleto de ausencias yo resucitado

Hasta que el río agonice en un mar lejano

De aguas tranquilas y coral dorado

No lo sé yo, supongo que esto será una

Herencia neurótica como tantas otras cosas

Lo cierto es que la muerte para mí era una obsesión

No solo como posible protagonista de esa muerte, sino

Como hombre que tendría que soportar unos desligamientos

Unos deshacimientos cuya sola idea me atormentaba