Pedro Paez

El día cinco de diciembre ni me quisiera acordar

En Culiacán, Sinaloa, mataron a Pedro Páez

A quien en vida supieron los valientes respetar

El valor de Pedro Páez estaba ya comprobado

Estaba reconocido que era un gallo muy jugado

Para poderlo matar lo agarraron desarmado

Aquel cobarde asesino ya con su mal pensamiento

Al ver a Pedro sin armas aprovecho aquel momento

Su pistola disparaba para así lograr su intento

Le tiro cinco balazos y Pedro de él se burlaba

Porque rodando en el suelo los balazos se quitaba

Pero por su mala suerte el ultimo le pegaba

¡Ahí le va, compa César!

Y vámonos pal Potrerillos, Sinaloa, oiga

Cuando empezaron los tiros toda la gente corria

Mataron a Pedro Páez, muy asustados decían

Y el aun agonizando no demostró cobardía

Pedro Pa' eso todo decía cuando en el suelo rodaba

Si trajera mi pistola otros gallos te cantaban

Las balas del asesino con palabras contestaban

Murió un hombre de valor, su nombre fue Pedro Páez

Al que tanto le temían con solo oírlo mentar

Al santo niño rogaban que no lo fuera a encontrar