Ottorino Respighi, nacido en Italia en 1879 y fallecido en 1936, es reconocido como una de las personalidades de la composición más destacadas del siglo XX. Respighi era un maestro de la orquestación, y esto se evidencia en su famosa serie de tres poemas sinfónicos: “Pinos de Roma”, “Fuentes de Roma” y “Fiestas romanas”. En ellos, el compositor nos transporta a las calles, parques y jardines de la ciudad, así como a las celebraciones a través de una rica paleta de colores orquestales. También sentía un profundo amor por la historia y la mitología italiana, lo cual se refleja en su obra Aires y danzas antiguos. En esta serie de suites, revive melodías renacentistas y barrocas de manera magistral, infundiéndolas con su estilo único. En contraste con su inclinación hacia la música antigua, también incursionó en corrientes vanguardistas de su época, como en el ballet “La boutique fantasque”. Lleno de color y ritmo, muestra su versatilidad como compositor y su capacidad para abrazar nuevas tendencias musicales. Sus obras siguen siendo interpretadas y apreciadas en salas de conciertos de todo el mundo. Su legado perdura gracias a su habilidad única para la orquestación, su capacidad para evocar paisajes sonoros y su pasión por la historia y cultura italiana.