A lo largo de toda la década de los 90, Josh Wink se dedicó a producir y mezclar algunos de los temas que se volverían imprescindibles en raves tanto de house como de trance o de techno. En lo que va del siglo XXI, Wink no ha dejado de explorar otras vertientes del sonido electrónico, componiendo de todo, desde trip hop a ambient, para seguir descolgándose más de un hit al año. Su influencia, evidentemente, es enorme y sigue arraigándose con fuerza, particularmente en América, hasta el día de hoy. Deja que su influencia te lleve a un estado elevado.