Nacido en Brescia a finales de los 80, Frah Quintale creció bajo la influencia de Neffa, Sangue Misto y otros heterodoxos de la escena hip-hop italiana, de los que heredó una visión omnívora del rap que empezó a poner en práctica como mitad del inclasificable dúo Fratelli Quintale. En sus discos como solista caben beats electrónicos y texturas de rock alternativo, versos rapeados con furia y delicadas viñetas melódicas, y en canciones como “Nei treni la notte”, la agridulce carta de amor a una ciudad que ya no es la que era, conecta con la gran tradición de la canción de autor italiana.