Encontré un lugar donde no se le permite entrar al tedio
Donde guardo a medio hacer la vida entera
Marcas de amor en las arrugas del colchón
Y en nuestra habitación el tiempo es una ruina
Parece que detrás de las cortinas
El mundo se pelea pero a ti y a mí eso nos da igual
Hay veces que las horas no caminan
No sé qué día es, ha vuelto a anochecer
Y me hundo en tu regazo
Bestias callejeras cuidan de la paz
Trepan cada noche el caracol de la escalera
Para colarse en nuestra cama
Y todo arde en llamas con la luz del mediodía
Sabanas frías, piel y sudor
El viento que se enreda en las persianas
Me cuenta lo que nadie quiere oír
Sacude la palmera del vecino y nidos
De lechuzas que hay enfrente de la casa
Todas las abejas vienen a morir aquí
Porque a este patio el sol
Viene a descansar después de un largo día
Y cuánto amor encierra
Este puñado de ladrillos y cuántas guerras
Lo duro del estrecho que separa nuestras bocas
Me hizo comprender
Que a lo que llamo hogar es simplemente estar contigo
