Venganza al Violín

Buenas tardes, comandante, supe que por aquí andaba

Y aproveché la ocasión para conseguir un arma

Usted a mí me debe una, con la muerte ha de pagarla

No se te olvide muchacho que la ley tengo en mis manos

No sé ni de lo que me hablas, quiero que seas más claro

No sabes ni lo que haces con esa pistola en mano

Vengo a vengar yo la muerte de mi hermano el Violín

Me llamo Evaristo Venses, y usted tiene que morir

Defiéndase, comandante, que hoy su grado tiene fin

Yo no tengo que ver nada con la muerte de tu hermano

Sé que fue en Santo Tomás, ya tiene varios años

A ese mentado Violín, yo no fui quien fue a matarlo

Se le entregó un buen dinero, eso no puede negar

El cuatro lo hizo el gobierno, formaron muy bien su plan

Hoy también yo tengo el mío, y aquí lo voy a matar

Cayó muerto el comandante, allá en Arcelia, Guerrero

Con 18 años de edad, un muchacho corrió el cerro

Montándose en su caballo se les peló al gobierno