Requiem

Olor a sangre y a muerte

Duele la vida, se rasga el alma

Se siente el fio que trae el silencio

Se sufre el tedio de estar tan solo

Tus manos yertas rasguñan mi alma

Tus ojos tristes revelan miedo

Y el sol oscuro que nos pario inmundos

Tarde o temprano quemará al destino

No mires atrás, estoy contigo

No sufras mas, sacrifica tu alma

Y cuando al fin estemos solos

Reiremos juntos, moriremos juntos

No mires atrás, quema tu destino

Recuerda que al final tu alma triunfara

De nada valen oraciones vanas

De nada sirven promesas rotas

Y de los despojos que caen del cielo

Se levantara un día el destructor del tiempo