Ma

Venero el espacio que sostiene mi existencia,

Suena el primer latido de mi corazón.

Me voy formando,

A través de ti me voy alimentando.

Me vas nutriendo,

Tejido de la vida, el árbol floreciendo.

Escucho tu canto,

Rodeado de tu manto dulce,

Portal, puente, fuerza creadora.

Tus aguas sagradas me cobijan y me abrazan,

Fuente tejedora entre espíritu y tierra.

Voy viajando hacia un nuevo mundo que voy encontrando,

Y voy llegando,

Me voy acercando hacia el gran milagro.

Por primera vez, el aire llena de vida mi pecho.

Lentamente abro los ojos, veo… y estás tú.

Me has dado la luz de vida,

Cuidándome en la subida,

Incondicional guardiana de mi corazón.

Gracias, Mamá.

Y tus ojos tan hermosos,

Guiando mi primer paso,

Me acobija en tus brazos,

Y me arrulla en tu regazo,

Cuidando mi sueño con tu dulce melodía y canto:

Larararai…

Gracias, Madre, por la vida,

Gracias por tu medicina.

Larararaira…