Almas Perdidas

Iban caminando amables Los soldaditos de plomo Buscando la libertad Sus vidas transcurrían En tiempos de licuadoras Y mentiras de amistad Y cansados de escuchar Al ojo que te hipnotiza Usando a los demás Puteando al japonés Se reían los idiotas Se reían sin pensar Oscuras almas engañadas Por la fatiga y la rutina La rutina marginal Y aunque nunca iban a ver Que está pasando en sus rincones Con los demás Pero sus almas no encontraban La razón del mundo de hoy En su interior Sus cuerpos se morían De vergüenza cada día Cada día al despertar/ Sus gorras tapadas De rocío en el vacío Sin nada que ocultar Y cansados de escuchar Al ojo que te hipnotiza Usando a los demás/ Pero sus almas no encontraban La razón del mundo de hoy En su interior