A las 3 de la Mañana

Son las tres de la mañana, creo que es un poco tarde, aunque... (Yo) Si (Sube la música, papa) Yo, si, escúchame Si, si, si, si (Yo) Hoy como tantas madrugadas, desvelado me pregunto exactamente Qué tiempo me queda en este mundo? Por un segundo repaso mis vivencias hasta el momento Y veo un espíritu humanista por el pasado corriendo Ha pasado el tiempo desde aquel último error Que a cambio de mi libertad entregué un amor Que con más que un pullover roto emprendí una marcha triste Rumbo a una felicidad que al parecer ya no existe Quizás fui un egoísta, un machista, un aburrido Que intentando ser amante olvidó cómo ser amigo Quizás hoy tenga motivos suficientes para herirme Y qué consigue con eso, ¿pudiera decirme? Porque usted puede cerrarme la puerta de su casa Pero es en vano si el corazón de ella me dice, "pasa" Si cuando está en su cuarto me abraza con la mente Y mis errores no sobrepasan lo que siente Usted me llamó poco hombre, manipulador, cretino Y me pidió que nunca más me entrometiera en su camino Que la dejara tranquila, que yo no la merezco Pero de merecer no hablemos, eso es un tema que detesto Cuántas veces como un ave, con sus cosas que migró Cuántas veces dice usted que por mi culpa lloró Cuántas veces por dolor una versión distinta dio Cuántas veces lloré yo señora y nadie me vio Hoy estoy en el presente que yo mismo construí Hoy usted quiere borrar todo el amor que le di Pero ella puede recibir diez mil telegramas Que seguirá igual si no hay ni uno del hombre que ella ama Son las tres de la mañana y mañana será otro día Que despertaré en la tarde, repitiéndome algún día Y se marchará otro día en el que usted no entiende Que somos dos locos y que uno del otro depende Y esta es otra lágrima que sobre papel se derrama Otra confesión del alma que la vida me reclama No hay manera de quedarse en una cama... Cuando el corazón te llama a las tres de la mañana, no Y si el recuerdo no me deja dormir Y siento que quedaron muchas cosas por decir Vuelvo a escribir lo que del corazón emana Otra vez, a las tres de la mañana (Yo) No tendría por qué mostrarme renuente a la cortesía O regalarle un discurso repleto de groserías Me comportaría distinto, mas no merece la pena Como quiera, fui un conflicto en la vida de su nena Sin modales para cenas formales ni cumpleaños Un extraño que le amargó su existencia por dos años Huraño, concepto adverso que mi corazón sentía Porque a mí si me dolía ser tratado con hipocresía Por esos días bebía constantemente Tenía problemas, la vieja se había marchado reciente Poco consecuente, acciones, situaciones contundentes Nunca dejé de quererla aunque actuaba diferente No me justifico, repaso las circunstancias Hoy que no es vivo el afecto y solo existen distancias Su arrogancia fue eficiente, no siento ni odio ni amor Y aunque me apartó de ella tampoco siento rencor Dios la coja confesada dentro de sus ideas de tul Y ojalá pueda encontrarla con ese príncipe azul Y no la cuestione tanto con su maniática vista Si es usted quien la ha formado tan tonta y materialista Yo un modelo, no, mi suelo se contamina He vivido circunstancias que quizás no se imagina, solo Las mismas doctrinas de aquél jóven y su ego Que hacía canciones de rap, bombardeadas por su fuego Son las tres de la mañana y otra vez la misma historia Llegan recuerdos felices y tristes a mi memoria No diré que hubo victoria o derrota, a última hora Pero en futuros sucesos, pregúntele por qué llora Y esta es otra lágrima que sobre papel se derrama Otra confesión del alma que la vida me reclama No hay manera de quedarse en una cama... Cuando el corazón te llama a las tres de la mañana, no Y si el recuerdo no me deja dormir Y siento que quedaron muchas cosas por decir Vuelvo a escribir lo que del corazón emana Otra vez, a las tres de la mañana (Yo) A las 3 de la mañana yo (Yo, yo) A las 3 de la mañana (Yo, si, ja) Al final, nadie escarmienta por cabeza ajena Usted no la ayuda con esas actitudes Déjela que vuele sola No la convierta en una cosa inútil